martes, 2 de noviembre de 2010

Que los que esperan no cuenten las horas, que los que matan se MUERAN de MIEDO. Que nunca sepas ni cómo, ni cuándo. Que el corazón no se pase de moda, que los otoños te doren la piel. Que las verdades no tengan complejos, que las mentiras parezcan mentira, que no te den la razón los espejos. Que no se ocupe de ti el desamparo, que ser valiente no salga tan caro, que ser cobarde no valga la pena. Que no te vendan amor sin espinas, que no te duerman con cuentos de hadas, que no te cierren el bar de la esquina.